Bilbao da la dulce bienvenida a la reciente apertura de Don Manuel, en Alameda Recalde. La nueva pastelería que marca una nueva etapa en la historia del emblemático nombre en el mundo de los dulces. El acto inaugural se celebró el pasado miércoles entre pasteles y carolinas.
La saga de Don Manuel nace de la pasión de Jose Manuel Angulo, quien empezó su camino de joven en el oficio. Tras años de formarse, trabajar y experimentar en la cocina, en diciembre de 1984 inauguró la localización que será su buque insignia: Alameda Urquijo, 39 en Bilbao, después centrándose en otros despachos. Y por fin, 41 años más tarde, Don Manuel retoma la presencia en la zona, en Alameda Recalde, 35, esta vez con el respaldo familiar de sus dos hijas, María y Nadia Angulo. Tal y como Don Manuel pide, su legado sera preservado en este equipo que conoce las recetas tradicionales y la filosofía de calidad que ha caracterizado la marca desde sus inicios.
La anterior pastelería de Urquijo, que hasta ahora ha sido su local principal, tuvo que cerrar sus puertas para dar paso a esta nueva apertura oficial, con invitados, prensa y amantes de la repostería local. Sin embargo, se busca que los amantes de la vieja Don Manuel reconozcan en el nuevo local los sabores que les habían conquistado en su anterior pastelería. Durante la inauguración, se resaltó que el espacio abrirá al público con una estética cuidada, fusiones entre tradición y diseño, y la aspiración de no perder la esencia artesanal.
Las joyas dulces de Don Manuel
Uno de los mayores distintivos de Don Manuel es su gran oferta dulcera. En su carta se encuentran clásicos como la famosa Carolina, el bollo de mantequilla, pasteles de arroz, Jesuitas, Canutillos, Baldosas de Bilbao… productos que forman parte de las tradiciones reposteras de Bizkaia.
La renovada propuesta aspira a convertirse en pan de cada día para los bilbaínos y visitantes, un punto de peregrinaje para quienes buscan lo clásico con un matiz moderno.