Este verano, las playas del Cantábrico han sido invadidas por un inusual visitante: las salpas. Aunque a simple vista pueden parecer medusas o restos de plástico, las salpas son invertebrados marinos que juegan un papel crucial en la regulación del clima.

¿Qué son las salpas?

Las salpas, o sálpidos (Salpidae), son organismos pelágicos gelatinosos que, a diferencia de las medusas, están más estrechamente relacionados con los humanos. Ibon Cancio, biólogo de la Estación Marina de Plentzia, explica: “Son tunicados, parientes cercanos a nosotros, se juntan formando cadenas.” Estos organismos tienen sistemas nervioso, circulatorio y digestivo complejos, con cerebro, corazón e intestinos.

Las salpas se desplazan por propulsión a chorro y se alimentan de fitoplancton. Su cuerpo transparente, que puede medir hasta 10 centímetros de largo, las hace fácilmente confundibles con las medusas. Sin embargo, cumplen funciones vitales distintas, incluyendo la reproducción asexual que les permite crear clones en condiciones favorables de alimento.

Un papel crucial en el ecosistema marino

Las salpas juegan un papel esencial en el ciclo biológico del océano al almacenar carbono en el fondo marino. Al alimentarse de fitoplancton, producen excrementos ricos en carbono que descienden al fondo del mar, donde el carbono puede permanecer durante años, contribuyendo a la regulación del clima. Este proceso es fundamental para mantener la salud de los ecosistemas marinos.

¿Por qué han llegado a las playas españolas?

La aparición masiva de salpas en las costas del Cantábrico y el norte del Mediterráneo se debe a varios factores:

  1. Aumento del fitoplancton: El crecimiento de las poblaciones de fitoplancton, su fuente de alimento, ha propiciado la multiplicación de las salpas.
  2. Cambio climático: El calentamiento de las aguas podría estar favoreciendo la proliferación de estos organismos.
  3. Fenómeno natural: La presencia masiva de salpas en las costas españolas ya se había reportado en 2019 y 2021, sugiriendo que es un fenómeno recurrente.

Reacciones en las playas

Los veraneantes han expresado su sorpresa y curiosidad ante la aparición de estos organismos. Aunque inofensivas, su presencia en grandes cantidades puede ser sorprendente para quienes disfrutan del mar. “Te golpean, las notas porque hay millones en el agua,” comentan algunos bañistas.

Aunque la invasión de salpas puede parecer alarmante, estos invertebrados son inofensivos y beneficiosos para el ecosistema marino. Los expertos aconsejan simplemente tener cuidado de no pisarlas en la orilla y dejar que cumplan su función en el medio ambiente.