El 11 de abril ya se ha quedado marcado en la historia como el día en el que Athletic recordó al mundo la emoción y el sentimiento que trasmite el futbol. La Gabarra tras 40 años finalmente volvió a ser la protagonista de la ría, donde 160 embarcaciones y 32 traineras se reunieron en torno a ella para celebrar con los campeones de la Copa este histórico momento. Desde muy pronto los aficionados ya se juntaban en torno al recorrido para poder estar en primera fila, y es que la zona del ayuntamiento antes de las 12 de la mañana estaba ya repleta de una marea rojiblanca de personas que esperaban con mucha expectación el paso de La Gabarra tras 40 años. Miles y miles de personas estuvieron horas esperado este gran acontecimiento que reunió en la ciudad un gran conglomerado de personas que acudieron de todas partes de España para no perderse la oportunidad de ver la Copa.
A las 16:30 horas, los jugadores del Athletic Club ya navegaban sobre la embarcación entre chillos y canticos de los aficionados. Comenzaron el recorrido desde el Real Club Marítimo de Abra, en Getxo y, poco a poco, fue pasando por distintas localidades como Portugalete, Sestao, Barakaldo, Erandio, hasta finalmente llegar al Ayuntamiento de Bilbao a las 19 horas de la tarde. A lo largo del trayecto, se pudo sentir la gran euforia de la gran marea de seguidores que se agolpaban en las vallas de la ribera intentado ver el conjunto de navíos. Además, se pudieron observar grandes y emotivos momentos, como cuando a la altura de San Mamés, los jugadores lanzaron pétalos de rosa al agua en conmemoración de todos los aficionados que ya no podían estar ahí para celebrarlo.
Una vez completado el recorrido, el recibimiento en el ayuntamiento fue apoteósico. El alcalde Juan Mari Aburto los recibió en las escalinatas del Consistorio con un aurresku de bienvenida y una recepción en el Salón Árabe, donde el alcalde y el presidente, el entrenador y el capitán del Athletic Club pronunciaron unas breves palabras. Tras ello, fue el momento en el que Iker Muniain cogió el micrófono. El jugador se convirtió en el presentador de la velada, presentando a cada uno de sus compañeros con bromas y risas. Inevitablemente, esto hizo que el discurso se retrasara, haciendo que el equipo llegara mucho más tarde de lo previsto a la diputación, donde esperaba para recibirlos la diputada de Bizkaia, Elixabete Etxanobe.
Han tenido que pasar 40 años para que La Gabarra haya vuelto a salir por las corrientes de la célebre ría de Bilbao, pero los jugadores ya prometían en sus discursos que no volvería a pasar tanto tiempo para que tenga que volver a producirse este hecho histórico. La afición del Athletic ha demostrado una vez más ser única y especial, demostrando un cariño y apoyo incondicional hacia su equipo de unas formas que jamás se han visto en ninguna parte. Este evento ha sido impactante en todos los lugares, tanto a nivel nacional como internacional, ya que las grandes oleadas de personas y la emotividad de la victoria han conseguido impresionar hasta los menos aficionados del fútbol. Este suceso ha servido para compartir especiales momentos entre familias y amigos, y también acordarse de aquellos que no han podido vivir este gran momento, pero que se quedará guardado en la mente y los corazones de todos los seguidores que estuvieron este 11 de abril en Bilbao.