En el impresionante escenario del Museo Guggenheim de Bilbao se dieron cita 150 invitados. Una vez más, los Premios Nº 1 CADENA 100 Euskadi eligieron este emblemático lugar de la capital vasca para honrar el talento de destacadas personalidades de la música, la cultura y el deporte. La noche estuvo llena de variedad musical, emociones y momentos humorísticos que impregnaron la gala, presentada por Javi Nieves y Mar Amate, junto con todos los participantes que se subieron al escenario.

La ceremonia se inauguró con las ocurrencias de Jimeno y Fernando Martín, quienes, cada día, añaden el toque más divertido en ‘¡Buenos días, Javi y Mar!’. Entre sus ocurrencias, ofrecieron un rápido tutorial sobre cómo colocarse correctamente la txapela, que junto a una estatuilla, es el premio que se llevan los galardonados en esta cita que hemos celebrado durante varios años en CADENA 100.

El primer premiado en subir al escenario fue Karra Elejalde, y el honor de entregarle el galardón recayó en Unax Ugalde, alguien que lo conoce muy bien, ya que han trabajado juntos en varias ocasiones, incluida la comedia del 2019, ‘Operación Concha’. La complicidad entre Chanel y Andrea Guasch era evidente. La admiración entre ellos es mutua y regalaron un abrazo sincero, demostrando que en la industria, más allá de competir por alcanzar los primeros puestos en ventas, prevalece el compañerismo.

El tercer premiado es uno de esos hombres que forma parte de la increíble diversidad musical de esta emisora. Álvaro de Luna, quien se encuentra en pleno proceso de promocionar su próximo trabajo con una serie de sencillos. Hasta ahora conocemos canciones como ‘Portarse mal’, ‘Todo contigo’, ‘La jugada’ y ‘Sin antifaz’, esta última junto a Ryden. La encargada de entregarle el premio y colocarle la txapela en la cabeza fue la actriz Cristina Medina, reconocida por su papel como Nines en más de 150 episodios de ‘La que se avecina’. Pero eso no fue todo, Álvaro también tomó el micrófono para cantar. Además de interpretar ‘Todo contigo’, animó a todos los presentes a aplaudir con su emocionante canción ‘Juramento eterno de sal’, que marcó un hito en su carrera.

Luego, pasamos de la música a otro ámbito cultural, ya que era el momento de reconocer al propio Museo Guggenheim. La directora general de Ábside Media, Lucía Fernández del Viso, fue la encargada de entregar el premio en representación del museo. Después de este galardón, la película ‘5 lobitos’ también fue reconocida, recibiendo el premio de manos de la Diputación Provincial de Bilbao. Esta película fue galardonada con tres Premios Goya en la última edición, incluido el de mejor dirección novel para Alauda Ruiz de Azúa.

Dos jugadoras del Athletic Club femenino, Eli Ibáñez y Nekane Díaz, subieron al escenario para reconocer el talento de Vanesa Martín. No es sorpresa para nadie su talento, pero sí lo es el detalle de que la cantante andaluza, con quien tengo una relación de amistad y admiración, confesó que se despierta cada día sintonizando esta emisora para escuchar ‘¡Buenos días, Javi y Mar!’. Más allá de recibir los merecidos reconocimientos que la acreditan como una auténtica Nº1, Vanesa nos deleitó con su poderosa voz interpretando temas como ‘Álgebra’, ‘Si Pudiera’ y ‘Cuando No Estabas’. Estas canciones contribuyeron a la banda sonora de una noche que quedará grabada en la memoria de todos los asistentes.

Estopa hizo lo propio, pero con un toque especial: se atrevieron a cantar en euskera. Sí, añadieron una pizca de humor, uno de los ingredientes que los ha llevado a ganar este reconocimiento de nuestra parte. El encargado de entregarles el premio fue el chef Josean Alija. Por cierto, él también fue responsable del menú de la noche, que consistió en tres exquisitos platos para deleitar los paladares. Comenzaron con una ensalada de langostinos con tartar de aguacate y salmón, luego siguieron con una lubina al pil pil de vainas y terminaron con un pastel de chocolate, sorbete de frambuesa y pipas garrapiñadas.

Aún quedaba un premio por entregar. Era el galardón que se otorga edición tras edición a una asociación local que se dedica a hacer la vida de los demás más fácil y agradable. En esta ocasión, el premio fue para Chernobyl Elkartea, una organización que, según se puede leer en su página web oficial, ha estado trabajando desde 1996 para facilitar que niñas y niños de la zona afectada por el desastre nuclear puedan fortalecerse al ser acogidos por familias en Euskadi y Navarra. Ahora, a los problemas de salud y socioeconómicos que enfrentan, se ha sumado una terrible guerra. El alcalde de la ciudad, Juan Mari Aburto, fue el encargado de entregar el premio antes de que todos los premiados y presentadores fueran convocados al escenario para cerrar una noche mágica con la tradicional foto de familia.