Con la llegada de la Semana Santa, ¿qué mejor manera de relajarse y reconectar con la naturaleza que visitando algunas de las termas naturales más impresionantes de España? Aquí te presentamos una selección de destinos donde puedes sumergirte en aguas termales mientras disfrutas del entorno natural.
Pozas de Arnedillo, La Rioja:Las pozas de Arnedillo, situadas al margen del río Cidacos, son un refugio natural donde puedes desconectar y disfrutar de un paisaje espectacular. Con aguas clasificadas como clorurado sódicas, sulfatado cálcicas, bromuradas, con iones de magnesio, hierro, silicio y rubidio, estas aguas son minerales medicinales con propiedades únicas.La temperatura de emergencia de estas aguas alcanza los 52,5 °C, lo que las convierte en hipertermales y sumamente relajantes. Ya sea que desees sumergirte en ellas o simplemente contemplar el entorno, las pozas de Arnedillo ofrecen un ambiente ideal para desconectar del estrés diario y conectar con la naturaleza.
Termas de Zújar, Granada:La poza termal de Zújar, en el pantano del Negratín, es un verdadero tesoro natural que no puedes dejar de visitar si eres un amante de los baños termales gratuitos y únicos en plena naturaleza.Ubicada en el municipio de Zújar, conocido como “ciudad termal”, esta poza de aguas sulfurosas es un auténtico regalo para los sentidos. Con temperaturas que rondan los 40 ºC, estas aguas termales son una delicia para sumergirse, especialmente durante los meses de invierno cuando contrastan con las bajas temperaturas exteriores.
Termas de Bande, Orense:
Las termas romanas de Bande, cerca de Santa Comba, Muiños y Bande en Ourense, son un tesoro escondido junto al embalse de las Conchas. Ideales para visitar en verano, ofrecen bañeras, piscinas y un lago natural. Además, cerca encontrarás restos del campamento romano Aquis Querquennis. Aunque no son de fácil acceso, vale la pena buscarlas por la experiencia única que ofrecen.