La Feria de Santo Tomás, la más relevante de Bizkaia, volverá a reunir a miles de personas el 21 de diciembre en Bilbao, en su 75 edición. Este evento, que se celebrará en el Arenal, contará con 235 puestos (20 más que el año anterior) y reunirá a 121 productores. La feria seguirá promoviendo la sostenibilidad, utilizando materiales biodegradables y vasos reutilizables. Además, reforzará su faceta solidaria con la colaboración de Bisubi, que ofrecerá 4.500 raciones de alubias con fines benéficos.
Nora Sarasola, directora de la Obra Social de BBK, destacó la importancia de este evento como una tradición que conecta a las personas con su territorio, cultura y valores. La feria no solo es un espacio para la venta directa de productos locales, como conservas, frutas, hortalizas, miel, pan y sidra, sino también un punto de encuentro entre lo rural y lo urbano. En este sentido, mencionó que el 71% de los vizcaínos prefieren consumir productos locales.
Asier Abaunza, concejal de Planificación Urbana de Bilbao, instó al uso del transporte público para facilitar el acceso a la feria y recordó que los productores contarán con plazas de aparcamiento gratuitas. También se habilitarán zonas de carga y descarga y baños públicos.
La solidaridad y sostenibilidad también serán ejes clave en esta edición. La fundación Bisubi, con más de 250 cocineros, elaborará las alubias junto a la Cofradía de la Putxera y las repartirá a través de diferentes asociaciones benéficas. La fundación destacó el poder de la gastronomía para generar un impacto positivo en la sociedad. Además, el evento cuenta con el certificado Erronka Garbia, que avala su compromiso con la sostenibilidad ambiental.
Este año, se espera la participación de más de 100.000 personas, y el evento continuará con la entrega de premios a los productores destacados en una gala el 31 de diciembre.