El Puente Colgante de Bizkaia, también conocido popularmente como Puente Bizkaia o Puente Colgante de Portugalete, ha reabierto sus puertas y reanudado su servicio tras varias semanas de obras para garantizar la seguridad y el buen funcionamiento de la infraestructura. La reapertura se produjo el pasado 20 de noviembre a las 15:00 horas, dos días antes de lo previsto, después de completar con éxito la sustitución de los 18 cables de sustentación que sostienen la barquilla transbordadora.
Esta intervención técnica, programada desde principios de noviembre, es clave para asegurar la estabilidad de una estructura que se inauguró en 1893 y que es considerada un icono del ingenio industrial vasco y un Patrimonio Mundial.
Con su reapertura, el puente vuelve a ofrecer su particular experiencia de conexión entre ambas márgenes de la ría del Nervión, combinando utilidad y ocio en uno. Además del servicio de barquilla para peatones, bicicletas y vehículos, los visitantes pueden disfrutar de la pasarela panorámica superior a más de 50 metros de altura, accesible mediante ascensor, desde donde se contemplan las vistas de la ría, el puerto de Bilbao, y los montes que rodean la zona.
Este emblemático puente no es solo una vía de transporte: es también un atractivo turístico. Las audioguías disponibles en varios idiomas permiten conocer la historia de la infraestructura, sus características técnicas y anécdotas de más de un siglo de servicio. La experiencia se completa con la posibilidad de cruzar la ría a bordo de la barquilla, suspendida bajo una estructura metálica de gran valor histórico y patrimonial.