Al hablar del Casco Viejo de Bilbao no solamente se tiene en cuenta la historia de sus calles, edificios o comercios de toda la vida, sino que es imprescindible mencionar la fuerte tradición gastronómica que emana de estas calles de la capital de Bizkaia, donde el gentío bilbaíno, y como no los turistas de todas las partes del planeta, se acercan de disfrutar de platos, pintxos y dulces por las calles del Casco Viejo.
Baste, en el corazón de Bilbao
El Restaurante Baste, ubicado en el corazón de Casco Viejo, es un símbolo total de la cocina tradicional vasca , y no solo por los bocados de sensaciones que se lleva el cliente a la boca sino que también por el ambiente que le rodea durante el servicio. Un local que no pierde la esencia y que se mantiene fiel a su estilo, y a sus clientes.
Este restaurante con más de medio siglo de vida y fundado por los hermanos Basterretxea en 1969, presume de una amplia barra de pintxos, platos combinados y menú, para todos los gustos.
El pintxo estrella, sin duda, es el mejillón relleno, bajo la etiqueta de el tigre. Un aperitivo que se prepara de forma continúa en las entrañas de la cocina del Baste y, que sobre todo durante el fin de semana, los venden ‘como rosquillas’. Pero en la barra también destacan otras delicatessen de pintxos como las anchoas rellenas de txangurro, los bocadillitos de merluza, las banderillas de champis o unas generosas croquetas.
Cafe Bar Bilbao, historia de la ciudad
Ubicado en la Plaza Nueva del Casco Viejo de Bilbao, el Café Bar Bilbao sigue siendo un punto de encuentro gastronómico para muchos bilbaínos y como no de todos los visitantes que recorren estas calles de la ciudad, en busca de degustar diferentes pintxos, platos o menús.
Para ello, el Café Bar Bilbao es una opción adecuada. Fundado en 1911 por Severo Unzue, fundador de otros cafés emblemáticos como el Iruña, y restaurado en 1992. Este tradicional local bilbaíno continúa su andadura gastronómica de la mano de su espectacular barra de pintxos, su amplia carta de raciones y diferentes menús. Entre todos ellos, destaca la ración de calamares como unos de los mejores de Bilbao.
Cabe destacar que una de las peculiaridades de este local, además de su excelente calidad hostelera, es que dispone de dos nombres. Por un lado, el primero que es ‘Café Bar Bilbao’ y el segundo llegó después de la renovación en el 92, con ‘Casa Pedro’, cuando pasó a manos de Pedro Martínez Basterra.
Restaurante Kasko, tradición y modernidad
Otra parada gastronómica imprescindible en el Casco Viejo de Bilbao es el Restaurante Kasko, situado en la calle Andra Mari, que se caracteriza por su cocina vasca, con un toque moderno, y por su música en vivo y exposiciones, que hacen disfrutar a todos los comensales que se adentran en su local.
Entre sus obras gastronómicas más destacadas se encuentran la paella con alioli y el bacalao al pil-pil. No cabe duda de que en el Kasko se respira una atmósfera que entremezcla la gastronomía y el arte, dando lugar a un viaje de sentidos y sabores cada vez que pruebas uno de sus platos o pintxos de su local. Tal y como confiesan en su página web oficial lo que pretenden es elaborar una “cocina de fusión, con recetas de todos los países pero ‘sin perder el Norte”.
Música y buena comida, eso es el Kasko. Una esencia histórica del botxo, donde deleitar el paladar con las obras culinarias del restaurante. Entre pintxos, menús y su carta, se tendrá que tomar una difícil decisión y se puede resaltar, entre otras variantes, el menú Kasko Degustación o el excelente menú de Juego De Cartas, el popular menú del programa de EITB.
Restaurante Victor Montes, elegancia culinaria
El Restaurante Víctor Montes es otra de las opciones más demandadas del Casco Viejo de Bilbao, ubicado en la Plaza Nueva, y que no pasa desapercibido para nadie, locales y turistas, con su elegante portón y de fondo unas baldas, tras las barra, repletas de una gran variedad de vinos, whiskies y coñacs, sin olvidar, por supuesto, la gran variedad de pintxos, carta y menú.
Y es que este elegante local cuenta con los más exclusivos productos de la gastronomía nacional, a la que se aplica una cocina tradicional con matices vanguardistas que dan el toque del ‘VÍctor Montes’ a todos los platos que se sirven en el restaurante.
Es por eso que en la búsqueda de los sabores más especiales y deliciosos, han salido platos únicos como el salmón Noruego con polvo de oro y trufa del Piamonte, o el Hígado de Foie fresco marinado 45 horas o las Anchoas de Mariposa del Cantábrico con caviar de arbequina sin nunca olvidarnos de los mejores productos Ibéricos de Bellota D.O Extremadura donde el Jamón es el protagonista en todas las mesa.