La 45ª edición de Aste Nagusia concluye con cifras récord y un ambiente de convivencia que ha marcado las jornadas festivas. Más de 1,5 millones de personas han disfrutado de las más de 500 actividades gratuitas organizadas por el Ayuntamiento de Bilbao, en una Semana Grande que, pese a algunas incidencias puntuales, ha sido valorada como un éxito por la organización.

Entre los eventos más multitudinarios destacan los fuegos artificiales, que congregaron a 900.000 espectadores durante el Concurso Internacional de Fuegos Villa de Bilbao; el Txikigune, con 90.000 participantes; los más de 100 conciertos programados, que reunieron a 200.000 personas; y el Teatro de Calle, que atrajo a 22.500 asistentes.

“Una ciudad que sabe disfrutar con respeto”

El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, ha destacado el clima de respeto y convivencia vivido durante los nueve días de celebración. “Bilbao tiene un modelo único de fiestas, donde la diversión, la seguridad y la inclusión van de la mano”, afirmó. A pesar de las grandes cifras de participación, no se ha registrado ningún delito grave, según fuentes municipales.

El dispositivo de seguridad conjunto de la Policía Municipal y la Ertzaintza se ha reforzado en los recintos de mayor afluencia, permitiendo una gestión eficaz de la seguridad ciudadana. Se han registrado 165 detenciones y 13 denuncias por tocamientos, cuyos presuntos autores han sido puestos a disposición judicial.

Cultura vasca, música y teatro: ejes de una fiesta diversa

Uno de los elementos más destacados de esta edición ha sido la amplia y diversa oferta cultural, con protagonismo de la cultura vasca y una apuesta clara por la música local y de raíz. La programación ha incluido conciertos para todos los gustos: desde la música clásica de la Encarnación hasta los sonidos euskaldunes de Gatibu o el pop-rock de Coque Malla y Shinova en Abandoibarra.

Además, la Plaza Nueva, aunque con aforo reducido por obras, acogió conciertos interculturales de gran acogida. La programación de Bilborock agotó entradas en varias jornadas, y el Teatro Arriaga estrenó el musical Mamma Mia!, que ya ha atraído a más de 9.000 espectadores.

Perfil familiar y educativo

El Txikigune, espacio dedicado al público infantil y familiar en el Parque de Doña Casilda, se ha consolidado como uno de los grandes éxitos de la Semana Grande. Con más de 30 actividades lúdicas y educativas, ha recibido a 90.000 personas y ha promovido valores como la igualdad y la sostenibilidad. Otro de los momentos familiares más multitudinarios fue el Desfile de la Ballena, que congregó a 150.000 personas en el centro de la ciudad.

Incidencias puntuales

A pesar del balance positivo, la organización ha lamentado la cancelación de tres actividades: un concierto en Abandoibarra por problemas técnicos y dos funciones de teatro al aire libre suspendidas por la lluvia. El Ayuntamiento ha agradecido la comprensión del público y ha subrayado que estos casos representan una mínima parte de la oferta festiva.

Balance y agradecimientos

El Ayuntamiento ha destacado el esfuerzo de los equipos técnicos, de limpieza, protección civil, programación cultural y cuerpos policiales, así como la coordinación con las entidades locales, hostelería y medios de comunicación. “Detrás de cada acto hay un trabajo silencioso y profesional que hace posible esta gran celebración ciudadana”, subrayó Aburto.

A falta de un año para su regreso, Marijaia ya ha sido despedida entre aplausos y emoción en su tradicional quema con las preciosas palabras de Olatz Agirre y la música de Francis Díez, poniendo el broche final a una edición histórica de Aste Nagusia. Bilbao ya la espera con los brazos abiertos para la próxima Semana Grande, con la ilusión renovada de volver a celebrar su fiesta más emblemática.