Las chicas del Trébol

La obra teatral, de humor y comedia, ‘Las chicas del Trébol’, ambientada en la ciudad de Bilbao del 83, está siendo todo un éxito y todavía se podrá disfrutar hasta el 10 de septiembre en el Palacio Euskalduna por un módico precio de 29 euros. 

Llegó a la cartelera del Euskalduna el pasado 19 de agosto y no se pudo estrenar en mejores fechas, que en plena Aste Nagusia de Bilbao. Con una trama totalmente relacionada con el Bilbao de hace 40 años, el de los nostálgicos, traslada a todos los espectadores a la época de los años 80 en Bilbao para recordar como era antes y poder verlo, ahora ya, con perspectiva. 

‘Las chicas del Trébol’ es una obra de teatro para conocer cómo era la ciudad, y su ambiente, con un toque más cómico, de la mano de la prestigiosa monologuista vasca Gurutze Beitia, que también ejerce de directora de la obra, acompañada por la veterana actriz Karmele Larrinaga e Iñaki Marauri, responsable de las composiciones musicales. En cuanto a la producción de la obra, corre a cargo de CID FCA! Producciones y AITATO producciones, mientras que el texto está escrito por Txemi Parra y dirigido por la propia Gurutze Beitia.

 

Un viaje al Bilbao de 1983

La historia de la obra transcurre una tarde noche de verano de 1983. Un asunto de cierta urgencia reúne a tres amigas en una trasnochado pub, en una calle cualquiera de Bilbao de los años 80. Completamente diferentes entre sí y unidas por una encomienda de amparo, la cuarta amiga y propietaria del Trébol, van a vivir una noche inolvidable llena de recuerdos, ilusiones, situaciones de humor, complicidad y emoción. Los personajes de esta obra son la morena Nekane (Gurutze), la rubia Begoña (Karmele) y Farrah, la pelirrosa (Marauri). 

Sin duda, esta obra es un viaje en el tiempo en toda regla al Bilbao de los 80, con otro aura, con una historia repleta de anécdotas, chascarrillos y guiños para los que recuerden lo que antes era la capital de Bizkaia. Y, es que para explicar el presente, se debe saber de donde se viene. 

‘Las chicas del Trébol’ no podrían haber llegado en mejor momento a Bilbao para su disfrute, entre risas y recuerdos del pasado. De esta forma, a pesar de contar vivencias para los más nostálgicos de aquel extravagante y viviente Bilbao, todavía sin el famoso Guggenheim a la orilla de la ría, es una obra para todos los públicos y que acercará el panorama bilbaíno de aquella época a los más jóvenes.